26 de diciembre de 2016

366 días, 12 meses, 1 año

Sí, 366 días (tocó bisiesto), 12 meses, en definitiva, UN AÑO desde que llegaste a mi vida, a nuestras vidas.


MI VIDA NO ES LA MISMA Y YO NO SOY LA MISMA. Mis prioridades han cambiado, mis miedos han cambiado, mis necesidades han cambiado, mis planes han cambiado, mis rutinas han cambiado...todo, absolutamente todo en mi vida ha cambiado porque todo gira en torno a ti, porque necesitas que esté ahí.


Es cierto que se me ilumina la cara al verte, olerte o escucharte, sonrío al saber que estás conmigo, al pensar que en nada te voy a comer a besos; pero también es cierto que hay días que estoy agotada, agobiada, perdida, ausente, y no creo que sea malo reconocerlo.

Disfruto de cada uno de los momentos en los que estamos juntas, me alucina como vas descubriendo el mundo que te rodea...Todo esto va muy deprisa...Tiempo, de verdad te mueves siempre a la misma velocidad?, yo creo que has acelerado demasiado, piénsalo, y desacelera... Echo de menos esas mañanas durante tus primeros cuatro meses de vida, en las que de madrugada nos quedábamos solas en la cama grande, tu acurrucadina junto a mi, sin quitarme la vista de encima con una amplia sonrisa, hasta quedarnos dormiditas, que pequeñina eras, que rápido has crecido. Adoro cuando me imitas, cuando aprendes de mi, aunque sea la mayor tontería, como hacer una pedorreta, intentar tocar la punta de la nariz con la lengua, hacer el indio... Sí, pequeña, tu mamá te enseña a hacer el payasete constantemente... Luego disimulo cuando te voy a recoger a la guarde y me recibes con un rugido, mientras todos piensas que me gruñes, realmente esperas que yo te conteste "el león! Ggggrrrr", tal y como hacemos en casa. Me derrito cuando escucho salir de tu boca un mama-mama-mama y te veo estirar tus manitas hacia mi, ¡zalamera!.

También os digo que no todo a sido "color de rosa" este año, claro que ha habido momentos de tensión, de discusión, de cansancio máximo, momentos de incertidumbre, momentos en los que he echado de de menos mi vida antes de ser mamá. Hay que asumir el cambio porque por mucho que digan que no cambia, sí que cambia, en mayor o menor medida según la demanda de tu Olor a Bebé pero ya no va a ser lo mismo. Todos mis horarios giran entre mi Olor a Bebé y mi trabajo, cuando voy de compras acabo con la bolsa llena de cosas para mi Olor a Bebé quedando nosotros en un segundo plano, nuestros amigos no tienen bebés por lo que sus actividades siguen siendo las mismas y poco a poco nos han apartado para ser un "de vez en cuando", por el momento nuestros viajes han quedado en un segundo plano, hacer algo en pareja solos creo que se nos ha olvidado lo que es... Pero nos encanta nuestra nueva vida, lo que nos aporta y lo que nos enseña, y se que  es cuestión de meses el que volvamos a ir recuperando todo lo que hemos dejado a un lado durante este año.


GRACIAS por haber llegado a mi vida, por este año maravilloso, si llego a saber que la experiencia de ser mamá me iba a gustar tanto hubiese empezado antes. Vamos a por este segundo año, que ya empieza más centrado que el anterior y con el objetivo de desgastar el parque, descubrir la playa y, como deberes, recuperar una de las actividades paralizadas, viajar los tres.

¿Primer año maravilloso y perfecto con vuestro Olor a Bebé?, o ¿primer año de caos, reinvente y asunción de un nuevo papel en la vida, como ha sido mi caso?


14 de diciembre de 2016

Fuga tras fuga 🤔

¡QUE NOS ESTÁ PASANDO! Se nos ha olvidado como poner un pañal o qué?. No es que seamos las personas más expertas del mundo pero después de 11 meses...

Hace 10 días mi Olor a Bebé empezó a hacer las cacas más blandas de lo normal y a los dos días estaba claro el diagnóstico, aquello cada vez era más líquido y más frecuente. Nos enfrentábamos a nuestra primera GASTROENTERITIS en un bebé.


A mi todo lo que coge me fulmina, no es que me quede ko, pero sí me pongo mala también. Esta vez no iba a ser menos. Todo empezó un jueves, y el viernes por la noche ya estaba haciendo reverencias, recordando mis meses de embarazo. Menudo dúo. El sábado la cosa no fue a mejor, a pesar de no tener nada en el estomago seguía vomitando lo inexistente, y mi Olor a Bebé seguía con lo suyo. Lo peor fue que el único que se mantenía fuerte, el papá de la casa, también fue invadido por la gastroenteritis. Menudo cuadro de casa ese fin de semana, suerte que tenemos dos baños porque sino la avería hubiese sido bastante gorda.

Por turnos, el sábado lo pasamos en la cama, no teníamos fuerzas para nada. Lo que no faltó fue una visita al médico que confirmó el diagnóstico. Las recomendaciones ya las sabíamos así que ya estábamos en ello; dieta blanda a base de pollo cocido, pescado hervido, tortilla francesa, jamón cocido, sueroral (nada de agua ni aquarius), etc. Durante ese día viví a base de gelatina de fresa para que no me doliese al no tener nada que echar, ¿recordáis mi Olor Consejo sobre la gelatina?, y bebiendo sueroral. Lo que aprendí durante este proceso es que el dolor de piernas y brazos que tenía se debía a la perdida de iones que se sufre al vomitar, y se repara con este suero; muy cierto, con medio litro los dolores fueron remitiendo hasta desaparecer.


En definitiva, nosotros recuperamos rápido pero nuestro Olor a Bebé ahí sigue. La verdad que es el único síntoma que tiene, la diarrea, porque apetito sigue teniendo y la fiesta le encanta. En cuanto a tratamiento, la pediatra nos ha recomendado Sueroral, Reuteri, dieta sin verduras y reducir la proteína de la leche. La pobre ha tardado pero 10 días después, ha mejorado. Lo que estamos es un poco desesperados porque llevamos diez días que caca es igual a fuga, pero de tener que ir a la bañera directos en muchas ocasiones, ¿se nos ha olvidado como poner pañales?, es lo que nos hemos empezado a preguntar porque no es normal. Del tema lavadoras mejor no os hablo porque no damos a basto con ella. ¿Alguien que pasase por lo mismo con la gastroenteritis de su Olor a Bebé?, solo por no sentirnos tan inútiles, jajajajaa. Estábamos usando dos marcas de pañales, Dodot Activity y Chelino; y una de ellas, Chelino, la hemos tenido que aparcar hasta la recuperación porque las fugas eran bestiales, con los Dodot se escapa un poco de vez en cuando pero contiene el tema mejor y cuando no lo hace no es tan exagerado. Tengo que decir que tenía en casa muestras de Moltex que también nos han ido muy bien en estos días, y me ha gustado mucho el tacto de estos pañales y el resultado.
Otra teoría nuestra, al ver que el fin de semana mejora y por semana vuelve a las andadas, es que el yogur normal, el que tomamos los adultos, no debe procesarlo bien y no le ayuda a recuperar del todo. En la escuela han empezado a dárselo y desde ese día flojea y no recupera. ¿A alguien le ha pasado?, ¿parezco una madre loca por pedir que no le den el yogur?, simplemente quiero probar si no comiéndolo recupera del todo porque es lo único nuevo que ha probado estos días...

¿Cómo lleváis las gastroenteritis de vuestro OLOR A BEBÉ?, ¿Alguna recomendación para las fugas?

4 de diciembre de 2016

Genio y figura.

Desde el minuto uno que te tuvimos con nosotros dejaste claro que ibas a tener un CARÁCTER FUERTE, bien marcado, que tenías claro lo que querías en cada momento, que sabías como querías que te hiciesen las cosas, en definitiva, que ERES TÚ QUIEN DECIDE.


En realidad, creo que ya lo demostrabas DESDE MI BARRIGA, si mamá pone la mano me muevo pero si la pone papá...stop!...otra vez mamá, ¡marcha para el cuerpo!...eyeyey que cambia la mano, ¡papá!, stop!. Como me reía con estos momentos pero como le fastidiaba al pobre papá; al final ya nos reíamos los dos porque nos parecía imposible, ¿cómo podías saber quién ponía la mano en cada momento?. Esto nos ocurría con todo el mundo, daba igual quien pusiera la mano en la barriga, abuelos, tíos, amigos...SOLO BAILOTEABAS CON MAMI.




A medida que fuiste cumpliendo meses ibas reforzando más tu carácter, nos quedaba claro, por ejemplo, con tus exigencias en el cambio de pañal, lo MANDONA eras, "ahora o ahora", gritabas en tu idioma como si no hubiese un mañana.


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Avanzamos al tema de la comida y aprendiste a REÑIR. Nos queríamos mantener serios delante de ti porque tenías que empezar a probar las cosas, y nos daba igual que hicieras pedorretas, que escupieses o que dieras un manotazo a la cuchara, que acabáramos las dos en la bañera, los azulejos, suelo y armarios pringados de comida...Solo queríamos que una cucharada o un trocito entrara en esa boquita... Imposible de contener la risa y entonces, ¡fiesta!, si estos gigantes se ríen, yo también me muero de la risa, ¡gané!, fin del intento nuevamente fallido. A los siete meses ya instauraste la moda del GRITO-RIÑO, un sonido que hacías cada vez que no te gustaba algo, no te hacíamos caso, etc; la secuencia era la siguiente: mirada con ceño fruncido, mano abierta arriba, grito-riño, bajo mano fuerte, ¡visto para sentencia señoría!, no había nada más que hacer después. Ahora, ya con diez mesazos, avanzamos y el momento de reñir es más cómico todavía, el grito-riño desapareció hace unas semanas para dar paso a MINI HULK, jajajaja, te enfadas y frunces toda la cara, te empiezas a poner roja y te encojes apretando los puños mientras gritas.
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Es que eres muy simpática pequeña, como un cuerpecito tan pequeño puede contener tanto GENIO.

Mi pequeña Olor a Bebé, empezaste a escuela desde hace unos meses y esto no ha hecho más que reforzar tu carácter. Eres la más pequeña de la clase con diferencia, lo que no hace que te acobardes. Tu mandas, ordenas, riñes y lo que haga falta, a las cuidadoras y al resto de niños, si no está todo como tu quieres o consideras que no te están prestando la suficiente atención. Aún no hablas ni caminas, solo emites sonidos y gateas, pero parece ser que es suficiente. Tu tutora me cuenta como la miras y la "llamas" mientras estiras tu bracito y abres y agitas la mano con la palma mirando hacia arriba, porque quieres que te haga cosquillas en la barriga o que te eche colonia como a los otros niños.

El colmo de los colmos de tu carácter son tus CONTRADICCIONES, descubiertas gracias a la escuela, y con las que nos reímos un montón tanto nosotros como las cuidadoras:

Contradicción nº1: LA COMIDA 



Desde que empezamos con la alimentación complementaria no hemos sido capaces de que comsa más de tres cucharadas de puré seguidas, el resto desaparece del recipiente pero lo come todo lo que está a tu alrededor. Solo demandas comer cuando lo hacemos nosotros y solo quieres lo que yo tenígo en el plato. Ni una pega por nuestra parte, cocinamos según lo que puedes comer y todos contentos, si quieres trocitos en lugar de puré porque no te lo vamos a dar.

Cuando empezaste en la escuela comentamos que igual les era complicado que comieses purés porque en casa no los querías... Perplejos nos quedamos cuando nos empezaron a llegar notas y notas con el resumen diario de la actividad de la escuela, en las que nos escriben de qué comes el puré cada día... Es cierto que al principio les costó pero en una semana empezaste a comer como una loca, no mucha cantidad, también es cierto, pero comes más que en casa.
Un día me dio por comentarle a una cuidadora que los fines de semana seguimos igual, que no hay quien te haga comer puré en casa, y que te tiras a por mi comida. Vamos, que en casa seguimos con los trocitos. La cuidadora perpleja me responde que eso lo teníamos que haber dicho porque entonces ellas también te hubiesen dado trozos y nada de puré. Al día siguiente, me colgaron el título de MAMÁ LOCA DE REMATE, probaron a darte trozos y les respondiste con arcadas...y así siguen, fase "prueba trozos-arcada".

No puedes imaginar lo que nos reímos con este tema. En la escuela puré, en casa trozos, jajajaja., y de ahí no te sacamos. ¡Cómo puedes saber tanto siendo tan pequeña!.

Contradicción nº2: CAMINAR


Empezaste a GATEAR con cinco-seis meses y con ocho ya te empezabas a PONER DE PIE para luego caerte de culo. A los nueve ya dabas PASITOS AGARRADA al respaldo del sofá, a la madera de la cuna...solo dabas pasitos en sitios en los que sabías que si te dabas un culazo no te mancarías. Hasta el momento, diez mesitos, nos hemos quedado estancados en esta fase, arrastras el culete por toda la casa pero los cuatro pasos que conseguimos que des al día solo los das en sitios blanditos, y eso de cogerte por los hombros para que camines un poco por el suelo que no se nos ocurra, ¡nos haces una sentada de protesta a la mínima!.

Hasta el momento todo normal, si no quieres caminar pues tampoco te obligamos, simplemente lo intentamos un poco todos los días por si te da por cambiar. Entonces llega el momento de la contradicción número 2, otra muestra más de tu carácter, de que haces las cosas cuando las tienes que hacer y no cuando te mandan los demás. Te aviso ya que esto habrá que negociarlo en un futuro porque no siempre va a ser lo que tu quieras cuando tu quieras. La semana pasada, cuando te fui a recoger a la escuela después de trabajar, ¡saliste caminando!. Me quedé flipando, ahí estabas tu, dando mini pasitos hacia la puerta donde yo te esperaba. Que granujilla, te da igual que el suelo sea duro, eeeeee. Pues desde ese día, sales siempre riéndote de la escuela dando tus pasitos mientras te cogen por los hombros. Eso sí, en el momento que levantas la cabeza y me ves, ¡cuerpo a tierra!, no vaya ser que en casa me pongan también a caminar sin parar, ¿no?, jajajaja, ERES LA CAÑA PEQUEÑA.


Dos territorios, dos costumbres, dos maneras de vivir... pues vete pensando que en casa también vas a tener que caminar algún día, vagoneta.

Por suerte, un compañero de trabajo de mi marido le ha comentado que les pasa lo mismo con su Olor a Bebé, lo que hace en la escuela no le hace en casa y viceversa. ¡Menos mal! porque a veces cansa escuchar que las cosas "raras" solo le pasan a una... Espero que a aquellos que os encontreis en una situación parecida os reconfortase saber que no sois los únicos. Mi maternidad no es perfecta pero me encanta ser mamá, y lo siento, pero por mucho que quieras aparentar no me creo que la tuya lo sea.

¿Cómo va el carácter de vuestro OLOR A BEBÉ? Me encantaría conocer vuestras anécdotas y "desastres".